Sencilla visita y degustación en la Finca Santavenere

Domino CASA VINICOLA TRIACCA  proveedor profesional

Hacia finales del siglo XIX, Domenico Triacca comerciaba vino entre Valtellina y Valposchiavo (Grigioni, Suiza), pero era un hombre ambicioso y quería producir su propio néctar noble de forma independiente,... Ver más

Hacia finales del siglo XIX, Domenico Triacca comerciaba vino entre Valtellina y Valposchiavo (Grigioni, Suiza), pero era un hombre ambicioso y quería producir su propio néctar noble de forma independiente, a partir de sus propias uvas. En 1897 compró 2000 metros cuadrados de terreno cubierto de viñedos en la zona de Valgella en Valtellina, Lombardía. Este fue el momento crucial en el que se creó la que se convertiría en una de las bodegas más importantes de Valtellina. Lamentablemente, Domenico Triacca murió en 1910 en un accidente mientras transportaba vino a lo largo del lago Poschiavo. Las riendas de esta incipiente empresa se las pasó a su viuda, Orsola, y posteriormente al más diligente de sus cinco hijos, Eugenio: clarividente, escrupuloso, decidido y de gran éxito. En los años cincuenta nuestro mercado se extendió hasta la región de Engadina, vendiendo vino de barrica de barriles de madera. Después de la Segunda Guerra Mundial, el cambio a las botellas se hizo en aras de la calidad, un almacenamiento más fácil y para adaptarse al gusto del consumidor. También se construyó una planta embotelladora en Zalende, Suiza, al sur de Poschiavo, para la operación suiza. Con la adquisición de una instalación de almacenamiento en Coira, fue posible conquistar y nutrir el mercado vital del norte de Graubünden, dominado hasta entonces por los comerciantes locales. Como resultado de este éxito, la empresa pudo invertir los beneficios en nuevos viñedos. Para entonces, la familia ya poseía unas 28 ha. En los años sesenta se hizo cargo de la tercera generación: Gino (un hábil vendedor), Domenico (un técnico ambicioso) y Rino (un director escrupuloso). A su lado, el siempre confiable tío Eugenio con su experiencia y carisma. La bodega Triacca alcanzó un hito histórico en 1969. La idea de diversificar se había reflexionado durante mucho tiempo y, como resultado de la adquisición de la gloriosa finca Madonnina en la denominación Chianti Classico, en el corazón de la Toscana, se logró. En el mismo año, la perla de la viticultura en la región de Valtellina, Lombardía, La Gatta en Bianzone, un antiguo monasterio dominicano, con su viñedo de 13 ha, fue adquirida en su totalidad a la bodega Mascioni cuando inesperadamente la pusieron a la venta. . Durante los años noventa, se produjo una mayor expansión en el sur de la Toscana con la adquisición de la finca Santavenere en Montepulciano y la cuarta generación se involucró: Giovanni, responsable del mercado suizo, y Luca, director técnico de las tres regiones de producción. Ver menos

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